"Lo dí todo por ti, lo diste todo por mí.
Lo doy todo por ti, ¿lo das todo por mí?"
Hemos estado juntas casi cuatro años. En esos cuatro años, cada una nos hemos reído, vivido nuevas experiencias tanto buenas como malas y sobre todo, hemos confiado la una en la otra. ¿Por qué ahora eso no es así?
Dejamos de hablar con tanta frecuencia, pero tampoco es que me concentrara en eso. Conociste nuevas chicas, que se fueron haciendo tus amigas... y a mí, quien de todas las personas que has considerado amigos se ha preocupado más por ti, a mí me das de lado. ¿Por qué? Porque yo hago cosas que, aunque a ti no te gusten, son por tu bien y cuando eches cabeza te darás cuenta de lo estúpida que estás siendo ahora. Porque cuando tú lloras, yo lloro. Cuando tú ríes, yo río. Cuando estabas mal por algo, yo estaba a tu lado y te apoyaba, en todo. Pero... claro, tus nuevas amigas son mejores que yo. Dices que ellas aceptan las cosas, que con ellas te lo pasas mejor... Pero en realidad es que a ellas les importas una mierda y que, al ellas cambiar tu forma de pensar, no te lo pasas tan bien conmigo.
Añoro aquella chica que se llevaba todo el día riendo, haciendo tonterías, cantando... que se ha convertido en otra que solo piensa en los chicos, fumar, y tener cuidado de hacer algo diferente a los demás.
Me duele hacer todo lo que te estoy haciendo, pero que cuando te des cuenta de que en realidad, por mucho daño que me haga o te haga, lo hago por el bien de las dos.
Espero que algún día te des cuenta de cómo te estás comportando, por ahora solo puedo decirte: Buena suerte.
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